Piquero y Pelaire

Estos gigantes txikis fueron realizados por Aitor Calleja para la comparsa de Aoiz en 2010. Con las figura de Piquero y Pelaire, la comparsa de Aoiz quiso homenajear dos de los trabajos tradicionales de los agoizkos.

Durante muchos años a los habitantes de Aoiz les llamaban pelaires, porque fue el oficio más extendido en la Villa. Había pelaires, que limpiaban, trataban y secaban las pieles. Es por ello que en casi todas las viviendas había pozos de agua, no sólo para beber sino también para utilizarla en el tratamiento de las pieles. Todavía hay alguna casa en la calle Arriba que recibe este nombre, “Casa Pelaire”

De los bosques del Irati, había que transportar la madera hasta el aserradero de Ekai. Sin vehículos motorizados, fue el río Irati la avenida por la que bajaban las maderas desde el valle de Aezkoa. Se soltaban los troncos por el río y bajaban lo que se denominó “pantanados”. Los piqueros posibilitaban a los troncos continuar el viaje, evitando que se quedaran enganchados o atravesados. Estos esforzados hombres , hiciera frío o calor, vivían prácticamente en el río, armados con una larga vara, con una especie de gancho en la punta denominada “pica”, de ahí el nombre de piqueros.